jueves, 8 de noviembre de 2007
*Boku no Strawberry*
Chapter One: Strawberry Lovers.
¿Ya es de día? Oh, buen Dios, juro que nunca vuelvo a tomar… Siento el hachazo literalmente en mi cabeza. ¿Qué hora es? No, esperen… ¿Qué diablos hice anoche?
Recuerdo un bar. Lo sé, era de esperarse con esta resaca, no creo haberla conseguido en la Iglesia. No es que sea experta, me malinterpretan, sólo voy a ese tipo de lugares cuando me veo en la necesidad de subirme el ánimo como sea porque… Maldición, ya me acordé por qué fui…
El idiota de mi novio rompió conmigo ayer.
¡Aaargh! ¡Es que sólo acordarme me descoloca! ¿¡Qué acaso no soy lo suficientemente buena para él!? Imbécil, qué se habrá creído… Sólo porque le fui infiel un par de veces… ¿Tiene que armar tal escándalo cada vez? Oh, bueno, de todas maneras sé que me va a llamar en un par de días y vamos a volver como las ocasiones anteriores. Es tan predecible el pobre.
Me pregunto, ¿por qué seguiré con él?
Y me respondo que no es el momento para pensar en eso.
Es hora de levantarme, no puedo seguir mirando la colcha de la cama ni un minuto más. Al darme la vuelta, noto que hay alguien a mi lado; sí, en la misma cama. Sonrío sin sorpresa alguna, me lo esperaba y con mayor razón tengo que irme pronto, no vaya a pensar que quiero un beso de buenos días o hablar sobre esto… Los hombres pueden ser tan tediosos cuando quieren.
Así que, emprenderé mi elegante retirada de… ¡Momento! ¡Este es MI apartamento! ¿¡Traje a un extraño aquí!? ¡¡Diablos, y él no tiene ni la cortesía de desaparecer antes de que yo despierte llevándose mi billetera o algo por el estilo!!
Lo miro de reojo, con expresión de fastidio. Mm… Tampoco está tan mal, aunque también era de esperarse, no me iba a traer cualquier cosa a casa. Cabello corto, castaño claro, delgado, piel clara y una espalda tan tentadora… Sí, justo mi tipo. Esta vez sonrío un poco menos santa (no que antes lo hubiera parecido, es un decir); si se quedó aquí, podríamos aprovechar un poco la mañana, ¿no? Aunque se ve algo pequeño, ¿habré estado cazando muchachos menores de veinte de nuevo?
Paso un brazo por sobre su cintura, acercándome a morder su oreja y subiendo la mano por su pecho donde…
…
…Corrección, pasé la mano por SUS PECHOS donde de tanta impresión tuve que tomar uno para asegurarme de que lo era… Y sí, lo era. Ambos. El chico tiene senos. El chico es chica. Estoy manoseando a una chica.
¿¡Qué, en nombre de todo lo santo y bueno del mundo, hace una mujer en mi cama!?
-¿Mmm?- se despierta, restregándose los ojos y volteando hacia mí. Ojos verdes, grandes y expresivos. Jojo, definitivamente mi tipo. De no ser porque tiene lo que acabo de tocar… Y sigo tocando. Creo que es hora de devolverle su espacio personal, ¿verdad?
Me retiro inmediatamente, con el rostro de una persona a la que se le hubiera aparecido el mismísimo Diablo mientras se agachaba a recoger el jabón en la ducha, ¡ya saben de qué cara hablo!
-Vaya, qué noche, ¿eh?- murmura bostezando y desperezándose.
Estoy demasiado asustada para mirar, pero tengo que hacerlo. Tomo la sábana y la levanto, con ojos de huevo frito. ¡Sí, tiene la ropa interior puesta! ¡Y yo también! Aunque yo además traigo una camisa… ¡Alivio!
-¿Qué pasa? Acaso… ¿Quieres seguir lo de anoche?- ¡Wow, una chica intenta seducirme! Sería una curiosa llamada para el 911. Estira los brazos con toda la intención de pasarlos por mi cuello, cosa que, obviamente, no la dejo hacer, poniéndome de pie de un salto sobre la cama y apuntándola con un dedo acusador.
-¡Alto ahí señorita desconocida! ¡No se tome tantas libertades conmigo que yo no tengo esas inclinaciones pecaminosas!-
...de todas las cosas que podía esperar, ciertamente no consideré como una posibilidad que se riera de mí tan descaradamente.
-¿De qué hablas, Josie? Soy tu novia, puedo tomarme las libertades que quie…-
-¿¡QUÉ!? ¿¡NOVIA!? ¡¡Ya le dije que no voy por ese camino!! ¡Yo soy muy femenina!- aseguro arremangándome la camisa en el brazo derecho, por si tengo que administrarle unos cuantos golpes para convencerla.
Frunce el entrecejo, poniendo una expresión tan infantil que caigo en cuenta de que soy mayor que ella -¡Tú me pediste que fuera tu novia, no puedes arrepentirte así!-
-¡Claro que puedo, estaba bajo el efecto del alcohol! ¿¡Quién se toma en serio las palabras de una borracha?!-
-Pero… Después de lo que hicimos… De lo que ME hiciste…-
Maldita, ¡está usando el recurso de las lágrimas! Ja, eso podrá funcionar con hombres, pero yo, en cambio, soy inmune a…
-¿No significó nada, Josie? Debes al menos tomar tu responsabilidad, después de que hicimos el am…-
-¡¡SSSSSHHHHHT!! ¡No sé de lo que hablas!- me cruzo de brazos, desviando la mirada… Aunque la vuelvo a ver al instante –No, no llores… Yo… Tomaré la responsabilidad, voy a estar contigo en todo lo que necesites y me voy a hacer cargo de…-
Momento, yo no pude dejarla embarazada…
-Olvídalo, te ofrezco quedarte a desayunar y estamos a mano-
-¿Qué? ¿Sólo eso?-
-Sí, sólo eso y deberías estar agradecida de que no te eche a patadas como a los otros- sentencio poniéndome de pie.
-¡Pero…! ¿Eso significa que no voy a ser tu novia?-
-¡Por supuesto que no vas a serlo! ¿Estás loca? ¡Somos mujeres!-
-¿Y eso qué importa? Lo que importa no es el cuerpo, sino…-
-Ya, ya, blah, blah, típica excusa de lesbiana… Yo no tengo esas inclinaciones, ya te dije- soné a perra, ¿eh? Uf, no tengo ganas de hacerla llorar de nuevo, no es su culpa ser rarita –Además, ¿para qué me quieres a mi de novia? No sabes nada de mí, apenas nos conocemos y…-
-¿¡Cómo que no sé!? ¡Yo sé muchas cosas sobre ti!-
¿Ah sí?- pregunto escéptica –Dime, ¿cuándo es mi cumpleaños?-
-¡¡15 de septiembre!!-
-¿Mi nombre completo?-
-¡¡Josie Jennifer Feller Armstrong!!-
-¿Color favorito?-
-¡Azul, pero le dices a todo el mundo que es el magenta aunque no estás segura de qué color es ese!-
-¿Comida favorita?-
-¡Pizza y cerveza!-
-Eh… ¡Grupo de sangre!-
-¡¡AB positivo!!-
-¿En serio? Siempre pensé que era B…-
-No, lo dice en tu brazalete médico junto a tu alergia a la penicilina-
-Oh… ¡OH! ¡¿De dónde sabes todo esto!?-
-Te dije que sabía mucho sobre ti… ¡Y por eso te puedo decir que quiero estar contigo con toda la seguridad del mundo! Tú… Tú me gustas mucho, en serio- ah, claro, y ahora se sonroja, después de arrojarme a la cara no sé cuántas veces que tuvimos sexo anoche.
Wow, un escalofrío me recorre. ¿De verdad fui capaz de hacer eso? Quizá cuánto bebí…
-Ok, ok, ok, ya me cansé de escuchar esto. Voy a ir a tomar una ducha, ¡No, no puedes acompañarme!, y cuando salga vamos a pretender que esto nunca pasó-
-¡Pero…!-
-¡No más sobre el tema!-
-¡Es que…!-
-¡Eh, eh, eh! ¿Qué acabo de decir?-
-¡Josie…!-
-¡Ssssh, sssh!-
¿Qué? ¡Oh, no, yo no soy mala! Sólo quiero… Refrescar un poco mi cabeza antes de hablar seriamente sobre esto y… ¿Sueno convincente? Al diablo, necesito aliviar un poco la resaca… ¿Alguien más notó lo chillona que puede ser esta chica? Muy atractiva será, pero al abrir la boca pierde todo su encanto.
¡Finalmente! ¡Mi baño! Suspiro al entrar y me apresuro a cerrar la puerta tras de mí; quién sabe si la pervertida intenta espiar… Obviando que ya me vio anoche como Dios me trajo al mundo, puede que aún tenga ganas de hacer sus… cosas raras lésbicas.
Examino mi cuerpo con curiosidad, pues, después del sexo, siempre queda alguna marca, ¿no? Mordidas o besos en el cuello, rasguños en alguna parte, moretones, desgarros… ¿Qué? ¿Sádica yo? Er…No, soy apasionada (o eso le repito al psicólogo). Da igual, el asunto es que no encuentro nada, ni el más mínimo indicio de que haya habido ‘algo de acción’ anoche, si saben a lo que me refiero…
¿Entonces qué? ¿Acaso fui yo la que… le hizo cosas a ella? ¿Así como la dominante? Uh, no, no me creo capaz… Para eso en serio tendrían que gustarte las chicas y, bueno, ¿qué puedo decir? Soy realmente hetero. Es decir, el ver chicas en la calle no me hace gay, ¿cierto? O sea, en verdad soy muy normal, veo de vez en cuando alguna película de alto contenido sexual, o tengo una ocasional masturbación con revistas de lencería femenina, pero no soy gay… A veces me pongo bajo las escaleras para ver la ropa interior de mis compañeras de trabajo o me fijo mucho en el baño cuando se arreglan los sujetadores, pero, ¿quién no lo hace? Jajajaja…
Sí… Jajajaja… ¡Jajajaja!
Oh, Dios mío, ¿cómo puedo llevar tanto tiempo siendo lesbiana sin darme cuenta?
Me doy un fuerte cabezazo contra la baldosa del baño, sintiendo como el cabello me cae rápidamente hacia delante por efecto del agua. ¡¡Traje una chica conmigo y le hice quién-sabe-qué cosas que no recuerdo!
“Ah… Josie… ¡¡Aaah!!”
Trago con dificultad.
¡Sí me acuerdo! ¡Su voz resuena en mi cabeza!
“¡Aaaaah, Josie, Josie…JOSIE!”
Oh, y suena sexy… Sí… ¡No, Josie, reacciona! ¡No puedes ser TAAAAAN lesbiana! ¿¡Cierto!?
¿Cierto?
…Vaya, cómo me gustaría oírla de nuevo…
Ok, sí soy bastante lesbiana. Qué descubrimientos que se hacen en la ducha, ¿ah? Me restriego la frente, ya resignada. Pretendo seguir con mi ducha, pero… la imagen de esa chica… Miro mi mano, recordando de pronto la sensación de cuando toque su pecho. Era… blando, suave, cálido… Extiendo los dedos y los vuelvo a contraer; quiero tocarla más.
Afirmo una toalla alrededor de mis caderas, pasando otra por mis hombros. Oh, bueno, si la chica ya vio bastante y ahora pretendo echármela al plato, ¿Qué acaso no puede ver un poco más de mi cuerpecito? ¡Vamos, Josie, saca a relucir tu atractivo animal!
Y alcancé a restregar mi cabello cuando la vi con una camisa mía puesta, sentada bastante amurrada al borde de mi cama.
-¿A ti qué te pasa?- pregunto quizá más fría de lo que quería.
Ella alza la mirada, sonrojándose bastante cuando levanto la toalla para seguir secándome mi hermosa cabellera.
-Mi novia no me hace caso…- medio lloriquea jugando con sus dedos índices, sin atreverse a verme a mí.
Sonrío sin poder evitarlo, ¿no les parece como una niña pequeña? -¿Quieres que te haga caso?- pregunté yo, subiendo una pierna a la cama, arrodillándome, y gateando de pronto hacia ella.
La veo asentir, bastante nerviosa, antes de que yo la atrapara por detrás, pasando los brazos alrededor de su cintura. En algún momento mi toalla cayó, pero en verdad no le hice mucho caso. Tomo su rostro del mentón, haciéndola girar para besar sus labios… Oh, sí, esta sensación la recuerdo. Esta boca, esta lengua, ya las había reclamado mías.
Subo las manos por su torso, deteniéndome a acariciar sus pechos. Igual de suaves que recordaba, la misma sensación de calidez.
-¡Aaah, Josie!- exclama medio de sorpresa, pasando después a cubrirse la boca, intentando en vano ahogar algunos gemidos.
Ya boté al basurero todas mis intenciones de ser hetero, casarme y tener hijos. Ni siquiera recuerdo el nombre de mi novio a estas alturas. Sonrío perversamente, casi con orejas de zorro asomándose entre mis cabellos, mientras bajo una mano a su entrepierna.
-¡¡No!!- …y soy detenida rotundamente por su mano que sujeta la mía.
-¿Por qué no?- pregunto yo, sonriendo forzadamente y con un tic en mi bella ceja.
-P-porque… ¡es raro! No… no vayas a… tocarme ahí…-
La suelto de pronto, haciendo que caiga a la cama porque yo estaba siendo su soporte para que no lo hiciera. Respiro sintiendo varias venas hincharse en mi frente.
-No lo hicimos anoche, ¿cierto?-
-¿A…a qué te refieres…Josie?-
-Respóndeme, no tuvimos sexo anoche, ¿cierto?-
Su silencio es mi respuesta. Me pongo de pie, agarrando con rabia mi toalla para cubrirme. ¡No habíamos hecho nada! ¡Me estuve preocupando por nada! ¡Dudé de mi sexualidad por…nada!
Abro la puerta de mi habitación de un golpe bastante fuerte, apretando los dientes y empuñando la mano que no sujeta la toalla. ¡Soy una tonta! ¿¡Cómo me dejé engañar así!? ¡Estaba jugando conmigo, con mis sentimientos! ¡Yo me enamoré de ella y le iba a dar mi todo que…!
-Er…- volteo a verla, asomándome a la habitación -¿Cómo te llamas?-
-Holly…- musita ella en un hilo de voz.
Suena a estrella de película porno… -Suena a estrella…- ¡Wow! ¡No le puedo decir eso! -…a estrella- termino la oración saliendo de nuevo.
-¡No, espera, espera!-
Me detiene tomándome del hombro, sacándome bastante de onda. La miro medio aturdida. -¿Qué?-
-Es que… sí pasó algo anoche…-
-Sí, te traje aquí, ¿y qué?-
-No, algo en…- apunta a la cama, sonrojándose bastante, y entonces caigo en cuenta, ¿y mis recuerditos? ¡Yo la escuché gemir y gritar mi nombre! (y vaya que era sexy la mujer esta… cof, cof…).
-¿Y qué sería eso?- pregunto echándome aire con la mano.
-Pues… í-íbamos a… eso… pero…- alza la mirada, atreviéndose a fijarla en mis ojos. –Te quedaste dormida…-
Observó hacia un horizonte lejano, llevándome una mano al mentón… Creo que tengo un flash-back… O si esto fuera una animación, ahora lo tendría…
FLASH-BACK! (¿Lo ven?)
-¡Venga, venga, hay que celebrar que somos novias!- dijo Josie quitándose la chaqueta, aventándola lejos, mirando a su acompañante con orejas y cola de zorro.
-Pero… ¿Estás segura? Bebiste mucho…-
-¡Nooo te preocupes! ¡Mañana seguro me acuerdo! ¡Ven aquí!-
Jaló a Holly de una mano, haciendo que cayera sobre ella. Llevó las manos a los botones de su camisa, desbrochándolos rápidamente a pesar del alcohol, masajeando sus pechos inmediatamente al deshacerse de ella.
-Aaah… Josie…- susurró ella, poniendo las manos en la cabeza de su nueva novia, la misma que ahora pasaba la lengua por su cuello. -¡Aaah…Josie…JOSIE!-
-[Inserte varios ronquidos]- hasta baba caía de su boca.
-¡¡JOSIEEEE!!-
FIN DEL TRISTE FLASH-BACK!
-Cof, cof…- tosí intentando olvidar lo que había pasado.
Nos quedamos ambas calladas. Es una situación incómoda, bastante. La miro de reojo, se ve tan triste… No me gusta verla así. Voy y me arrodillo frente a ella, tomando su rostro y sonriéndole, cuando me doy cuenta de algo… -Entonces, ¿ayer sí lo ibas a hacer?-
-Pues… sí…- se sonroja de nuevo. –Tú dijiste que… era nuestra celebración… Pero ahora… No quieres estar conmigo, ¿cierto?-
Creo que mis labios presionando sobre los suyos fueron su respuesta. –Démosle una oportunidad, ¿te parece?-
Asiente en silencio, sonriendo.
Qué tranquila es, creo que podremos… -¡¡TE QUIERO, JOSIE!!- me echa los brazos al cuello, exclamando eufórica.
…¿En qué me vine a meter?
-Ya, levántate, voy a preparar el desayuno… Y pensar qué hago contigo…- ¿la amarro con cuerdas o cadenas esta noche? ¡…Digo! ¿La dejo que se quede? ¿La acepto como mi novia? ¿Me la como después de la cena?
Entérese de esto y más en nuestro próximo capítulo y… -¡Josie! ¿Me prestas ropaaaa? ¿Y tiene algún patito de hule por ahí? ¡Me aburro si no hay!-
…Si es que sigo viva y ella también.
Esto fue: Strawberry Lovers.
~Te amo, Kary, Tender Strawberry.
Autora:Kita-chan
¿Ya es de día? Oh, buen Dios, juro que nunca vuelvo a tomar… Siento el hachazo literalmente en mi cabeza. ¿Qué hora es? No, esperen… ¿Qué diablos hice anoche?
Recuerdo un bar. Lo sé, era de esperarse con esta resaca, no creo haberla conseguido en la Iglesia. No es que sea experta, me malinterpretan, sólo voy a ese tipo de lugares cuando me veo en la necesidad de subirme el ánimo como sea porque… Maldición, ya me acordé por qué fui…
El idiota de mi novio rompió conmigo ayer.
¡Aaargh! ¡Es que sólo acordarme me descoloca! ¿¡Qué acaso no soy lo suficientemente buena para él!? Imbécil, qué se habrá creído… Sólo porque le fui infiel un par de veces… ¿Tiene que armar tal escándalo cada vez? Oh, bueno, de todas maneras sé que me va a llamar en un par de días y vamos a volver como las ocasiones anteriores. Es tan predecible el pobre.
Me pregunto, ¿por qué seguiré con él?
Y me respondo que no es el momento para pensar en eso.
Es hora de levantarme, no puedo seguir mirando la colcha de la cama ni un minuto más. Al darme la vuelta, noto que hay alguien a mi lado; sí, en la misma cama. Sonrío sin sorpresa alguna, me lo esperaba y con mayor razón tengo que irme pronto, no vaya a pensar que quiero un beso de buenos días o hablar sobre esto… Los hombres pueden ser tan tediosos cuando quieren.
Así que, emprenderé mi elegante retirada de… ¡Momento! ¡Este es MI apartamento! ¿¡Traje a un extraño aquí!? ¡¡Diablos, y él no tiene ni la cortesía de desaparecer antes de que yo despierte llevándose mi billetera o algo por el estilo!!
Lo miro de reojo, con expresión de fastidio. Mm… Tampoco está tan mal, aunque también era de esperarse, no me iba a traer cualquier cosa a casa. Cabello corto, castaño claro, delgado, piel clara y una espalda tan tentadora… Sí, justo mi tipo. Esta vez sonrío un poco menos santa (no que antes lo hubiera parecido, es un decir); si se quedó aquí, podríamos aprovechar un poco la mañana, ¿no? Aunque se ve algo pequeño, ¿habré estado cazando muchachos menores de veinte de nuevo?
Paso un brazo por sobre su cintura, acercándome a morder su oreja y subiendo la mano por su pecho donde…
…
…Corrección, pasé la mano por SUS PECHOS donde de tanta impresión tuve que tomar uno para asegurarme de que lo era… Y sí, lo era. Ambos. El chico tiene senos. El chico es chica. Estoy manoseando a una chica.
¿¡Qué, en nombre de todo lo santo y bueno del mundo, hace una mujer en mi cama!?
-¿Mmm?- se despierta, restregándose los ojos y volteando hacia mí. Ojos verdes, grandes y expresivos. Jojo, definitivamente mi tipo. De no ser porque tiene lo que acabo de tocar… Y sigo tocando. Creo que es hora de devolverle su espacio personal, ¿verdad?
Me retiro inmediatamente, con el rostro de una persona a la que se le hubiera aparecido el mismísimo Diablo mientras se agachaba a recoger el jabón en la ducha, ¡ya saben de qué cara hablo!
-Vaya, qué noche, ¿eh?- murmura bostezando y desperezándose.
Estoy demasiado asustada para mirar, pero tengo que hacerlo. Tomo la sábana y la levanto, con ojos de huevo frito. ¡Sí, tiene la ropa interior puesta! ¡Y yo también! Aunque yo además traigo una camisa… ¡Alivio!
-¿Qué pasa? Acaso… ¿Quieres seguir lo de anoche?- ¡Wow, una chica intenta seducirme! Sería una curiosa llamada para el 911. Estira los brazos con toda la intención de pasarlos por mi cuello, cosa que, obviamente, no la dejo hacer, poniéndome de pie de un salto sobre la cama y apuntándola con un dedo acusador.
-¡Alto ahí señorita desconocida! ¡No se tome tantas libertades conmigo que yo no tengo esas inclinaciones pecaminosas!-
...de todas las cosas que podía esperar, ciertamente no consideré como una posibilidad que se riera de mí tan descaradamente.
-¿De qué hablas, Josie? Soy tu novia, puedo tomarme las libertades que quie…-
-¿¡QUÉ!? ¿¡NOVIA!? ¡¡Ya le dije que no voy por ese camino!! ¡Yo soy muy femenina!- aseguro arremangándome la camisa en el brazo derecho, por si tengo que administrarle unos cuantos golpes para convencerla.
Frunce el entrecejo, poniendo una expresión tan infantil que caigo en cuenta de que soy mayor que ella -¡Tú me pediste que fuera tu novia, no puedes arrepentirte así!-
-¡Claro que puedo, estaba bajo el efecto del alcohol! ¿¡Quién se toma en serio las palabras de una borracha?!-
-Pero… Después de lo que hicimos… De lo que ME hiciste…-
Maldita, ¡está usando el recurso de las lágrimas! Ja, eso podrá funcionar con hombres, pero yo, en cambio, soy inmune a…
-¿No significó nada, Josie? Debes al menos tomar tu responsabilidad, después de que hicimos el am…-
-¡¡SSSSSHHHHHT!! ¡No sé de lo que hablas!- me cruzo de brazos, desviando la mirada… Aunque la vuelvo a ver al instante –No, no llores… Yo… Tomaré la responsabilidad, voy a estar contigo en todo lo que necesites y me voy a hacer cargo de…-
Momento, yo no pude dejarla embarazada…
-Olvídalo, te ofrezco quedarte a desayunar y estamos a mano-
-¿Qué? ¿Sólo eso?-
-Sí, sólo eso y deberías estar agradecida de que no te eche a patadas como a los otros- sentencio poniéndome de pie.
-¡Pero…! ¿Eso significa que no voy a ser tu novia?-
-¡Por supuesto que no vas a serlo! ¿Estás loca? ¡Somos mujeres!-
-¿Y eso qué importa? Lo que importa no es el cuerpo, sino…-
-Ya, ya, blah, blah, típica excusa de lesbiana… Yo no tengo esas inclinaciones, ya te dije- soné a perra, ¿eh? Uf, no tengo ganas de hacerla llorar de nuevo, no es su culpa ser rarita –Además, ¿para qué me quieres a mi de novia? No sabes nada de mí, apenas nos conocemos y…-
-¿¡Cómo que no sé!? ¡Yo sé muchas cosas sobre ti!-
¿Ah sí?- pregunto escéptica –Dime, ¿cuándo es mi cumpleaños?-
-¡¡15 de septiembre!!-
-¿Mi nombre completo?-
-¡¡Josie Jennifer Feller Armstrong!!-
-¿Color favorito?-
-¡Azul, pero le dices a todo el mundo que es el magenta aunque no estás segura de qué color es ese!-
-¿Comida favorita?-
-¡Pizza y cerveza!-
-Eh… ¡Grupo de sangre!-
-¡¡AB positivo!!-
-¿En serio? Siempre pensé que era B…-
-No, lo dice en tu brazalete médico junto a tu alergia a la penicilina-
-Oh… ¡OH! ¡¿De dónde sabes todo esto!?-
-Te dije que sabía mucho sobre ti… ¡Y por eso te puedo decir que quiero estar contigo con toda la seguridad del mundo! Tú… Tú me gustas mucho, en serio- ah, claro, y ahora se sonroja, después de arrojarme a la cara no sé cuántas veces que tuvimos sexo anoche.
Wow, un escalofrío me recorre. ¿De verdad fui capaz de hacer eso? Quizá cuánto bebí…
-Ok, ok, ok, ya me cansé de escuchar esto. Voy a ir a tomar una ducha, ¡No, no puedes acompañarme!, y cuando salga vamos a pretender que esto nunca pasó-
-¡Pero…!-
-¡No más sobre el tema!-
-¡Es que…!-
-¡Eh, eh, eh! ¿Qué acabo de decir?-
-¡Josie…!-
-¡Ssssh, sssh!-
¿Qué? ¡Oh, no, yo no soy mala! Sólo quiero… Refrescar un poco mi cabeza antes de hablar seriamente sobre esto y… ¿Sueno convincente? Al diablo, necesito aliviar un poco la resaca… ¿Alguien más notó lo chillona que puede ser esta chica? Muy atractiva será, pero al abrir la boca pierde todo su encanto.
¡Finalmente! ¡Mi baño! Suspiro al entrar y me apresuro a cerrar la puerta tras de mí; quién sabe si la pervertida intenta espiar… Obviando que ya me vio anoche como Dios me trajo al mundo, puede que aún tenga ganas de hacer sus… cosas raras lésbicas.
Examino mi cuerpo con curiosidad, pues, después del sexo, siempre queda alguna marca, ¿no? Mordidas o besos en el cuello, rasguños en alguna parte, moretones, desgarros… ¿Qué? ¿Sádica yo? Er…No, soy apasionada (o eso le repito al psicólogo). Da igual, el asunto es que no encuentro nada, ni el más mínimo indicio de que haya habido ‘algo de acción’ anoche, si saben a lo que me refiero…
¿Entonces qué? ¿Acaso fui yo la que… le hizo cosas a ella? ¿Así como la dominante? Uh, no, no me creo capaz… Para eso en serio tendrían que gustarte las chicas y, bueno, ¿qué puedo decir? Soy realmente hetero. Es decir, el ver chicas en la calle no me hace gay, ¿cierto? O sea, en verdad soy muy normal, veo de vez en cuando alguna película de alto contenido sexual, o tengo una ocasional masturbación con revistas de lencería femenina, pero no soy gay… A veces me pongo bajo las escaleras para ver la ropa interior de mis compañeras de trabajo o me fijo mucho en el baño cuando se arreglan los sujetadores, pero, ¿quién no lo hace? Jajajaja…
Sí… Jajajaja… ¡Jajajaja!
Oh, Dios mío, ¿cómo puedo llevar tanto tiempo siendo lesbiana sin darme cuenta?
Me doy un fuerte cabezazo contra la baldosa del baño, sintiendo como el cabello me cae rápidamente hacia delante por efecto del agua. ¡¡Traje una chica conmigo y le hice quién-sabe-qué cosas que no recuerdo!
“Ah… Josie… ¡¡Aaah!!”
Trago con dificultad.
¡Sí me acuerdo! ¡Su voz resuena en mi cabeza!
“¡Aaaaah, Josie, Josie…JOSIE!”
Oh, y suena sexy… Sí… ¡No, Josie, reacciona! ¡No puedes ser TAAAAAN lesbiana! ¿¡Cierto!?
¿Cierto?
…Vaya, cómo me gustaría oírla de nuevo…
Ok, sí soy bastante lesbiana. Qué descubrimientos que se hacen en la ducha, ¿ah? Me restriego la frente, ya resignada. Pretendo seguir con mi ducha, pero… la imagen de esa chica… Miro mi mano, recordando de pronto la sensación de cuando toque su pecho. Era… blando, suave, cálido… Extiendo los dedos y los vuelvo a contraer; quiero tocarla más.
Afirmo una toalla alrededor de mis caderas, pasando otra por mis hombros. Oh, bueno, si la chica ya vio bastante y ahora pretendo echármela al plato, ¿Qué acaso no puede ver un poco más de mi cuerpecito? ¡Vamos, Josie, saca a relucir tu atractivo animal!
Y alcancé a restregar mi cabello cuando la vi con una camisa mía puesta, sentada bastante amurrada al borde de mi cama.
-¿A ti qué te pasa?- pregunto quizá más fría de lo que quería.
Ella alza la mirada, sonrojándose bastante cuando levanto la toalla para seguir secándome mi hermosa cabellera.
-Mi novia no me hace caso…- medio lloriquea jugando con sus dedos índices, sin atreverse a verme a mí.
Sonrío sin poder evitarlo, ¿no les parece como una niña pequeña? -¿Quieres que te haga caso?- pregunté yo, subiendo una pierna a la cama, arrodillándome, y gateando de pronto hacia ella.
La veo asentir, bastante nerviosa, antes de que yo la atrapara por detrás, pasando los brazos alrededor de su cintura. En algún momento mi toalla cayó, pero en verdad no le hice mucho caso. Tomo su rostro del mentón, haciéndola girar para besar sus labios… Oh, sí, esta sensación la recuerdo. Esta boca, esta lengua, ya las había reclamado mías.
Subo las manos por su torso, deteniéndome a acariciar sus pechos. Igual de suaves que recordaba, la misma sensación de calidez.
-¡Aaah, Josie!- exclama medio de sorpresa, pasando después a cubrirse la boca, intentando en vano ahogar algunos gemidos.
Ya boté al basurero todas mis intenciones de ser hetero, casarme y tener hijos. Ni siquiera recuerdo el nombre de mi novio a estas alturas. Sonrío perversamente, casi con orejas de zorro asomándose entre mis cabellos, mientras bajo una mano a su entrepierna.
-¡¡No!!- …y soy detenida rotundamente por su mano que sujeta la mía.
-¿Por qué no?- pregunto yo, sonriendo forzadamente y con un tic en mi bella ceja.
-P-porque… ¡es raro! No… no vayas a… tocarme ahí…-
La suelto de pronto, haciendo que caiga a la cama porque yo estaba siendo su soporte para que no lo hiciera. Respiro sintiendo varias venas hincharse en mi frente.
-No lo hicimos anoche, ¿cierto?-
-¿A…a qué te refieres…Josie?-
-Respóndeme, no tuvimos sexo anoche, ¿cierto?-
Su silencio es mi respuesta. Me pongo de pie, agarrando con rabia mi toalla para cubrirme. ¡No habíamos hecho nada! ¡Me estuve preocupando por nada! ¡Dudé de mi sexualidad por…nada!
Abro la puerta de mi habitación de un golpe bastante fuerte, apretando los dientes y empuñando la mano que no sujeta la toalla. ¡Soy una tonta! ¿¡Cómo me dejé engañar así!? ¡Estaba jugando conmigo, con mis sentimientos! ¡Yo me enamoré de ella y le iba a dar mi todo que…!
-Er…- volteo a verla, asomándome a la habitación -¿Cómo te llamas?-
-Holly…- musita ella en un hilo de voz.
Suena a estrella de película porno… -Suena a estrella…- ¡Wow! ¡No le puedo decir eso! -…a estrella- termino la oración saliendo de nuevo.
-¡No, espera, espera!-
Me detiene tomándome del hombro, sacándome bastante de onda. La miro medio aturdida. -¿Qué?-
-Es que… sí pasó algo anoche…-
-Sí, te traje aquí, ¿y qué?-
-No, algo en…- apunta a la cama, sonrojándose bastante, y entonces caigo en cuenta, ¿y mis recuerditos? ¡Yo la escuché gemir y gritar mi nombre! (y vaya que era sexy la mujer esta… cof, cof…).
-¿Y qué sería eso?- pregunto echándome aire con la mano.
-Pues… í-íbamos a… eso… pero…- alza la mirada, atreviéndose a fijarla en mis ojos. –Te quedaste dormida…-
Observó hacia un horizonte lejano, llevándome una mano al mentón… Creo que tengo un flash-back… O si esto fuera una animación, ahora lo tendría…
FLASH-BACK! (¿Lo ven?)
-¡Venga, venga, hay que celebrar que somos novias!- dijo Josie quitándose la chaqueta, aventándola lejos, mirando a su acompañante con orejas y cola de zorro.
-Pero… ¿Estás segura? Bebiste mucho…-
-¡Nooo te preocupes! ¡Mañana seguro me acuerdo! ¡Ven aquí!-
Jaló a Holly de una mano, haciendo que cayera sobre ella. Llevó las manos a los botones de su camisa, desbrochándolos rápidamente a pesar del alcohol, masajeando sus pechos inmediatamente al deshacerse de ella.
-Aaah… Josie…- susurró ella, poniendo las manos en la cabeza de su nueva novia, la misma que ahora pasaba la lengua por su cuello. -¡Aaah…Josie…JOSIE!-
-[Inserte varios ronquidos]- hasta baba caía de su boca.
-¡¡JOSIEEEE!!-
FIN DEL TRISTE FLASH-BACK!
-Cof, cof…- tosí intentando olvidar lo que había pasado.
Nos quedamos ambas calladas. Es una situación incómoda, bastante. La miro de reojo, se ve tan triste… No me gusta verla así. Voy y me arrodillo frente a ella, tomando su rostro y sonriéndole, cuando me doy cuenta de algo… -Entonces, ¿ayer sí lo ibas a hacer?-
-Pues… sí…- se sonroja de nuevo. –Tú dijiste que… era nuestra celebración… Pero ahora… No quieres estar conmigo, ¿cierto?-
Creo que mis labios presionando sobre los suyos fueron su respuesta. –Démosle una oportunidad, ¿te parece?-
Asiente en silencio, sonriendo.
Qué tranquila es, creo que podremos… -¡¡TE QUIERO, JOSIE!!- me echa los brazos al cuello, exclamando eufórica.
…¿En qué me vine a meter?
-Ya, levántate, voy a preparar el desayuno… Y pensar qué hago contigo…- ¿la amarro con cuerdas o cadenas esta noche? ¡…Digo! ¿La dejo que se quede? ¿La acepto como mi novia? ¿Me la como después de la cena?
Entérese de esto y más en nuestro próximo capítulo y… -¡Josie! ¿Me prestas ropaaaa? ¿Y tiene algún patito de hule por ahí? ¡Me aburro si no hay!-
…Si es que sigo viva y ella también.
Esto fue: Strawberry Lovers.
~Te amo, Kary, Tender Strawberry.
Autora:Kita-chan
Suscribirse a:
Entradas (Atom)
